Juego de cartas
A lo largo de los aproximadamente 1.000 años de historia de los juegos de cartas, han ido apareciendo y desapareciendo diversos juegos, más o menos populares. Algunos son más clásicos que otros, y algunos se han hecho más populares sólo en los últimos años y en determinados círculos o zonas. Con una baraja típica de 52 cartas, también puedes idear tus propios juegos de cartas y reglas. Sin embargo, si no quieres ser tan innovador y quieres empezar a jugar enseguida, has llegado al lugar adecuado.
En este texto, queremos presentar un ejemplo de juego de cartas que se adapta a muchos contextos y momentos diferentes en los que quieres divertirte más. Trataremos los puntos principales del juego, qué jugadores pueden participar, las reglas de juego típicas que se aplican y reglas de juego alternativas que puedes utilizar si lo deseas. Así que si quieres inspiración para tu próxima noche de juegos, ¡sigue leyendo!
Juego de cartas Estrés
Un juego de cartas muy divertido y rápido que se adapta a cualquier momento en el que quieras jugar a juegos de cartas es Stress. Es un juego de cartas tanto para niños como para adultos y es ideal como juego de cartas para dos jugadores. También puedes jugar con varios jugadores, pero también solo. El objetivo del estrés es hacer palitos con todos los montones que se le han dado al jugador en el menor tiempo posible.
Reglas del juego
Antes de empezar el juego, los dos jugadores deben sentarse uno frente al otro en una superficie plana. A continuación, uno de los jugadores reparte la baraja en 13 montones de cuatro cartas. A continuación, cada jugador tiene seis montones delante y el montón restante se coloca como frontera entre los jugadores. Las cuatro cartas deben estar boca arriba para que ambos jugadores puedan verlas. Entonces empieza el juego.
- La tarea consiste en coger uno de los seis montones propios, y hasta ahora ocultos, y cambiar las cartas de él por las que están boca arriba en el borde. Los jugadores sólo pueden sustituir una carta cada vez y siempre debe haber cuatro cartas en el borde.
- A continuación, los jugadores pueden cambiar de pila en cualquier momento, hayan conseguido o no recoger un palo. Sin embargo, sólo pueden tener cuatro cartas en la mano a la vez. Por ejemplo, si un jugador tiene un siete en un montón y está recogiendo sietes en otro, primero debe cambiar el siete del primer montón por una carta del borde y luego coger el siguiente montón para cambiar la carta impar que haya en él por el siete deseado.
- Los jugadores que observen que su adversario está cobrando una determinada denominación también pueden optar por el sabotaje. En el ejemplo anterior, el jugador puede coger el siete, que está desguarnecido en la frontera. Sin embargo, esto significa que el jugador que saboteó no puede completar el montón formado por las cartas deseadas del otro jugador.
- Cuando uno de los jugadores consigue reunir un palo en un montón de forma que las cuatro cartas sean de la misma denominación, el montón está completo. Entonces también debe colocarse boca arriba para que el otro jugador se sienta más estresado por el éxito.
- Cuando uno de los jugadores haya conseguido completar los seis montones, deberá gritar «¡estrés!». Entonces el jugador ha ganado.
Reglas de juego alternativas
Si hay varios jugadores en el juego, se aplican las mismas reglas, pero cada jugador recibe menos montones. Sin embargo, no puede haber más de seis, ya que cada jugador debe tener al menos dos montones cada uno. También hay que advertir que cuantos más jugadores participen, más tiempo de espera habrá para que alguien coloque la carta deseada en el borde.
Si buscas un juego de cartas para uno, Stress también es una buena opción. Sin embargo, si juegas solo, tendrás que enfrentarte a los doce montones tú solo, con el tiempo como oponente. Te recomendamos que utilices un cronómetro para que puedas jugar contra ti mismo y tu propia velocidad.
Para hacer que el estrés sea aún más difícil y estresante, los jugadores también pueden tener una regla por la que cada pila debe ser liberada después de un cierto tiempo o acción. Tal vez cada pila sólo pueda repartirse durante cinco segundos, o el jugador sólo pueda sustituir una carta cada vez.
Otra regla alternativa podría ser que cada jugador debe gestionar sus montones en un orden determinado. A continuación, pueden colocarse en una línea en la que el jugador debe empezar por la izquierda y terminar por la derecha. Esto hace que el juego sea más avanzado y requiera mucha más planificación y estrategia. Pero es perfecto si los jugadores ya han calentado motores y quieren enfrentarse a un reto.
El estrés es, por tanto, un juego de cartas perfecto para quienes desean tener reglas a las que atenerse pero que inviten a la libertad creativa. Tú y tus compañeros, si los tienes, podéis idear muchas reglas o normas diferentes que hagan que el juego se adapte más a vuestras preferencias y deseos.
